El problema de la coordinación en un sistema de gobierno basado en la división del trabajo : el caso alemán
En: Documentación Administrativa. -- no. 230-231 ((Abr.-Set. 1992), 0). --
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(Abr.-Set. 1992)
Se examinan los problemas concernientes a la coordinación del trabajo gubernamental en Alemania. Se consideran los procesos de diferenciación social existentes en este país y la necesidad de coordinación que ellos implican. Se describen los organismos de coordinación y sus funciones, en un sistema de gobierno caracterizado por un alto grado de división del trabajo. La unificación de Alemania en 1990 plantea nuevos problemas en lo concerniente a la coordinación del trabajo gubernamental. La República Federal Alemana se caracterizó por una marcada diferenciación social, expresada en el reparto del poder, los procesos de división del trabajo, las distribuciones competenciales y la complejidad de las redes profesionales, informativas y de autoridad en la sociedad. Las instancias gubernamentales alemanas tienen a su disposición un conjunto de instrumentos administrativos tradicionales a efectos de la coordinación, que van desde las audiencias hasta las comunicaciones escritas, pasando por procedimientos de concertación entre los órganos administrativos. Los gabinetes centrales de los gobiernos, la Cancillería Federal y las cancillerías de los Lander son los entes que están en mejores condiciones para cumplir el papel de las instancias generales de coordinación. La coordinación constituye una de las funciones básicas que en materia de gestión de políticas llevan a cabo las cancillerías. En el ámbito de la coordinación, se ha creado un sistema de intercomunicaciones entre la Cancillería y los departamentos, a través de unidades especiales de tipo "espejo", que reflejan la división ministerial del gobierno, y otras de tipo transversal, que se super
ponen horizontalmente a este reparto competencial. La existencia de sistemas económicos diferenciados hace que los proyectos en el ámbito financiero presenten un alto grado de interdependencia. Por consiguiente, los planes de ordenamiento territorial siempre traen aparejadas importantes implicancias en materia de coordinación. Esta situación se ha complejizado con la incorporación de nuevos Lander en el proceso de unificación alemana, así como por la consideración de nuevos temas tales como la problemática ambiental. La coordinación se incluye entre las funciones gerenciales clásicas, tanto en las empresas como en las administraciones públicas. En un sistema de gobierno dotado de un alto grado de división del trabajo, el ajuste de las actividades parciales de las distintas unidades gubernamentales figura entre los rasgos más característicos de la actividad tanto de los políticos como de los funcionarios con responsabilidades operativas. Los aspectos sistémico-institucionales de la coordinación deben ser complementados con la consideración de la dimensión humana del problema. Aún en organizaciones estructuradas tradicionalmente con moldes burocráticos, se aprecia que la dirección se hace cada vez más personalizada. En consecuencia, es preciso destacar la incidencia de la actuación personal en el éxito de la coordinación de un sistema de gobierno altamente diferenciado.
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