Pozzi, Ernesto
Saavedra : gente de trabajo
En: Historias de Buenos Aires. -- Año 1, no. 4 ((Jul. 1987), 0). -- Buenos Aires : Instituto Histórico de la Ciudad de Buenos Aires, Jul. 1987

Hasta 1887 lo que es hoy el barrio de Saavedra pertenecía al partido de Belgrano; formaba parte del extenso cinturón rural que acordonaba a la ciudad. Después de incorporado el partido a la Capital Federal en ese año, se va a producir la paulatina expansión del centro a los barrios debido al afincamiento de los inmigrantes, proceso este que incluirá también a Saavedra. A principios de este siglo el parque estaba ocupado por un lago que era el centro de diversión y paseo en góndola para los que "venían del centro". Desde la década del 20 los loteos y el tranvía facilitaron el asentamiento de los inmigrantes: españoles, italianos y muchas familias alemanas que a lo largo de 2 décadas de configuración "suburbial" fueron tornando lo rural en urbano. Se radicaron como residentes que debían trabajar fuera del barrio. El arroyo Medrano y el parque -creado en 1946- eran centros de reunión infantil, de ahí que el parque siga siendo el corazón del barrio. La unión familiar quedó demostrada durante la depresión de la década del 30: además del cuidado del gallinero y la quintita familiar, las mujeres bordaban y tejían para afuera, o lavaban y planchaban a domicilio. Algunos vecinos recuerdan que salieron a trabajar como canillitas a los 12 ó 13 años; casi todos empezaron a trabajar después de terminar la escuela primaria, aunque ya a los 9 ó 10 años, durante el verano, los colocaban como ayudantes en los comercios del barrio por $ 15 m/n por mes, además de algunos artículos. El crecimiento del barrio fue autónomo, por reproducción de la primera oleada poblacional que fue única, ya que estuvo exento de la migración interna de principios de los 40. A med
iados de la década del 30 comenzaron a ampliarse las fuentes de trabajo en el propio barrio o zonas muy cercanas (Núñez, Urquiza), reforzando el autonomismo demográfico e impidiendo la emigración de jóvenes. Ya antes de 1945 se habían establecido R.C.A. Víctor, Lanfranconi, fabricantes de pelotas de goma; después de 1945: la Philips, F.A.T.E., Virason (fábrica de imanes) y talleres pequeños y medianos como tornerías. Antes de los 40 cuando la radio todavía no se había generalizado, las pocas familias que poseían receptores vieron sus casas convertidas en "clubes de oyentes", reforzando una de las características del barrio: la fluída relación social entre los vecinos que se conocían y ayudaban entre sí. La década del 40 corresponde a la juventud de los talleristas y del barrio: nuevos empedrados, nuevos transportes, edificios y talleres nuevos. Advierten dos épocas bien definidas en el ámbito laboral: antes y después de Perón; desde 1945-46 aparecen nuevos sindicatos, los delegados tienen más peso en la estructura laboral, todos tienen vacaciones pagas, aguinaldo. Recuerdan los bailes en el club social donde concurren las chicas celosamente vigiladas; la autoridad paterna sobre las mujeres era total, hacia los 40 se fue produciendo un cambio en las costumbres, después del 50 se amplían rápidamente las posibilidades del consumo: la heladera, el lavarropas reducen las cargas hogareñas de la mujer y hay un paulatino aflojamiento de la autoridad paterna y de las severas reglas sociales de las colectividades italianas e hispánica. Fue una época signada por la fluída relación con los demás, porque había más tiempo y afectuosidad.

1. ARGENTINA; 2. AR; 3. SAAVEDRA (BARRIO); 4. HISTORIA; 5. BUENOS AIRES; 6. BARRIOS I. Larrateguy, Susana II. Kuhn, Ernesto Guillermo